Fundación de la ciudad de San Isidorio de Holguín
A Don Francisco García Holguín, le correspondió como premio por sus acciones en la conquista de México una merced real por la cual los territorios situados al sur del cerco, entre los ríos a los que llamó Fernando e Isabel hoy Jigüe y Marañon, que era la denominación dada por los aborígenes, pasaban a su propiedad. En el año 1545 García Holguín, su esposa Doña Isabel Fernández de Sandoval y algunos seguidores fundan el primer caserío, para lo cual usaron a los indígenas de la zona.
Los historiadores plantean que García Holguín regresó a México donde poseía extensas propiedades muriendo en estas tierras. A partir de este primer halo, se fueron formando a su alrededor los de Managuaco, Los Guazumas (Guasimas), Las Cuevas, Cayo Llano, etc. El 3 de abril de 1720, vísperas de San Isidoro, fue inaugurada la iglesia de este nombre, colocándola también bajo la advocación de nuestra Señora del Rosario, a la que se dedicó la capilla a la derecha del nuevo templo.
En 1752 se agregaron los paternos San Idelfonso y San Miguel que dieron nombre a las calles (Aricochea y Luz Caballero). Al producirse la ocupación de La Habana por los ingleses, estos trataron de incursionar en la zona norte de la antigua provincia oriental, produciéndose un enfrentamiento entre las tropas y los holguineros, en los territorios entre Auras y Gibara, el 19 de mayo de 1745, las tropas inglesas tuvieron que retirarse con más de 70 bajas.
En 1752, Holguín se convierte en la cuarta ciudad del país en obtener esta condición. Para esa época y según Morell de Santa Cruz, contaba con 1291 personas blancas y 135 esclavos y existían 211 casas de rústica y sencilla construcción, donde solo había una escuela pública a cargo de Don Luis González de Rivera. En 1863 ya existían 76 ingenios, 753 vegas de tabacos y cientos de fincas rústicas atendidas por esclavos, lo que muestra el crecimiento del término territorial.
Geografía
La provincia de Holguín está situada al norte de la parte Oriental del país. Es la cuarta en extensión con 9 300,6 km², siendo el municipio Mayarí el más extenso con 1308,4 km². El extremo más septentrional es la Playa Juan Antonio, en Gibara, el meridional Arroyo Blanco en Sagua de Tánamo, el oriental la Boca del Río Jiguaní en Moa y el más occidental Sabanazo en el Municipio Calixto García. Limita al norte con el Océano Atlántico, al sur con las Provincias de Granma y Santiago de Cuba, al este con la de Guantánamo y al oeste con la de Las Tunas.
Holguín tiene una situación geográfica privilegiada, posee 350 km. de costas. Presenta hermosas playas e interesantes accidentes geográficos, como son las bahías de Gibara, Banes y Nipe, esta última la mayor de Cuba y considerada una de las mayores del mundo.
Relieve
Se caracteriza por un complicado y singular relieve, relacionado con las condiciones litológicas (rocas) y tectónicas (estructurales). En el territorio se pueden distinguir tres regiones principales: Las llanuras que bordean la costa y zona centro - sur de la provincia (Llanura de Nipe y del Cauto), con alturas entre 0.50 m, que presentan un carácter abrasivo del litoral al interior de la provincia, acumulativo con fragmentos de terrazas marinas, playas, en algunos sectores y ciénagas marginales con mangle en otros.
La zona centro – sur, ocupada por llanuras de origen marino, por lo que actualmente fluyen importantes ríos con la presencia de formas y complejos fluviales, presentando un desarrollo pronunciado de depósitos aluviales. En el sector occidental, las llanuras denudativas onduladas y colinosas, que bordean el sistema de elevaciones de Maniabón y alcanzan alturas entre 50 – 100 m, con pendientes entre 0 – 8%.
Los valles se encuentran alineados, al igual que las cadenas de elevaciones en dirección este – oeste y los efectos de la erosión diferencial son evidentes en toda el área. Con alturas entre 100 – 300 m, aparece el sistema de elevaciones o cerros de Maniabón de singular morfología. En las alturas y zonas colinosas, con pendientes entre 8 – 15%, se observan procesos erosivos – cársicos y denudacionales que conforman típicos cerros de pendientes abruptas y cimas planas (mogotes).
La máxima elevación de este sector es el Cerro Galano con 459 m. En el sector oriental, aparecen las zonas premontañosas de Mayarí, Sierra Cristal y Sagua – Baracoa con alturas entre 100 – 300 m y las áreas montañosas de igual nombre, con alturas entre 300 – 750 m y más, cuya mayor elevación es el Pico Cristal con 1 231 m, punto culminante de la provincia. Estas montañas constituyen bloques erosivos tectónicos, donde aparecen cortezas de intemperismo terríticas, de alto contenido de hierro, níquel y otros minerales. Cuantiosos ríos recorren el territorio, destacándose el Mayarí, Sagua de Tánamo y Nipe, el primero es el de mayor extensión con 106 Km de longitud, junto al Sagua son los de mayor caudal, se suman numerosos arroyuelos y manantiales.
Flora y fauna
La provincia Holguín posee una de las floras más ricas en especies endémicas de Cuba, debido a la presencia de grandes extensiones de su territorio cubiertas por formaciones vegetales que se desarrollan sobre suelos originados a partir de rocas ultrabásicas (serpentinas). Estas formaciones van desde los manglares en las zonas costeras, hasta selvas tropicales, las que son conocidas como cuabales y charrascales.
En la provincia los cuabales se presentan fundamentalmente bordeando la ciudad de Holguín y cubriendo gran parte de las llanuras y pequeñas elevaciones de los municipios Rafael Freyre, Báguanos y Holguín; mientras que los charrascales se encuentran en las montañas de los municipios Mayarí, Frank País, Sagua de Tánamo y Moa. Entre las especies más significativas de la flora holguinera se pueden citar, la Rosa de sabana, el cactus enano, el roble de Sabana, la Jacaranda arbórea, La Yuraguana, etc.
Flor de Holguín
Elementos botánicos que dan particularidad al territorio Suphorbia podocarpifolia: (endémico estricto del territorio de la provincia desde Moa hasta Cerro Galano) esta planta fue propuesta y aprobada a finales de la década del 80 como Flor de la Provincia. Holguín está situada en uno de los territorios más ricos en diversidad biológica del archipiélago cubano, mostrando una heterogeneidad
de ecosistemas desde la costa hasta las montañas donde habitan especies notables para la diversidad biológica regional y mundial; precisamente en las montañas del norte es donde se concentra el grueso de la diversidad y el endemismo de Cuba.
Aparecen aproximadamente 4000 especies de plantas superiores, de las cuales 2000 son endémicas (de las aproximadamente 3000 conque cuenta la Flora de Cuba). En la parte oriental se encuentran las zonas de mayor riqueza florística, como la Sierra de Nipe con 750 endémicos (de los cuales 120 son estrictos del área, es decir endémicos locales y la Sierra de Moa con más de un millar).
Las familias botánicas que mayor cantidades de endémicos tienen en el territorio holguinero son: Rubiaceae, Asteaceae y Bignoniacae.
Un elemento a destacar es la presencia de algunos géneros especialmente importantes en la escala evolutiva de las plantas superiores como la presencia de los géneros: Magnolia y Talauma en las montañas de Nipe-Baracoa, la presencia de géneros monotípicos (integrados por una sola especie) como Harnakia Dasytropis.
Neobesseya cubensis: el cactus enano de Holguín (endémico estricto).
Juniperus lucayana: conocida como sabina y mencionada por Martí en su diario de campaña.
Hidelgardia cubensis: conocida como Guana, endémico cubano cuyo areal antiguamente se extendía hasta la provincia de Camagüey, pero el mismo se ha ido reduciendo y las mejores poblaciones se hallan hoy en los suelos calizos de la costa de Holguín, fundamentalmente entre Guardalavaca y Bahía de Vita, esta planta era muy demandada por la bondad de su fibra para confeccionar sombreros, e incluso pantalones en las guerras de independencia. Dentro de las especies más notables se pueden encontar las polimitas que se destacan por su colorido y belleza.
En Holguín habita el ave nacional de Cuba, el Tocororo (Priotelus temnurus).
Se muestran especies interesantes por su tamaño, albinismo e hibridismo, entre las de mayor talla se destacan la variedad gigante del caracol Liguu fasciatus, el Almiquí (Solenodon cubanus) el mayor insectívoro viviente en la actualidad; y el Carpintero Real (Campephillus principalis) visualizado por última vez en 1986.
Entre los más pequeños del mundo se presentan el alacrán enano (Microtityu fundorai) que mide 13 mm de largo, el zunzuncito o Pájaro Mosca (Mellisuga helenae) con 63 mm de largo y la rana (Eleutherodactylus iberia) con 10 mm de longitud.
Clima
El clima de la provincia de Holguín es tropical húmedo, con dos períodos bien definidos, uno de lluvia y otro de menos precipitaciones: el primero se extiende de mayo a octubre (aunque para algunos estudiosos se extiende hasta noviembre) en este período el mes más lluvioso es octubre, el segundo, denominado de menos lluvia va de noviembre (recordar lo anterior) hasta abril con un mes más seco, febrero; además se puede agregar que las precipitaciones varían del interior a la costa y de oeste a este en todo el territorio de la provincia.
Por la extensión superficial de la provincia y su complejidad morfológica, climáticamente se dividen en tres áreas bien definidas, tipificados por sus modelos de temperatura, lluvia y características eólicas. La primera, la zona del interior caracterizada geográficamente por colinas y zonas llanas, la cual no recibe la influencia directa del océano, en esta área las precipitaciones son causadas fundamentalmente por el calentamiento diario, los registros de temperatura media son los más altos del área provincial ubicados históricamente entre 24,0 y 25,6 grados ºC, con una oscilación anual de 4,0 ºC entre el mes más frío (febrero) y el más cálido (agosto).
La segunda, la llamada zona costera se caracteriza por la influencia directa de las aguas del océano Atlántico con menos oscilación térmica diurna que la zona anterior, la media anual es de 26,5 ºC y su oscilación térmica anual es también de 4,0 ºC, con febrero como el mes más frío y julio y agosto más cálido con un comportamiento térmico muy similar. La tercera, y última área, la zona montañosa del este de la provincia influenciada por su altitud, en ella ocurren los registros térmicos más altos más bajos y los más altos de precipitaciones, la media histórica más baja es de enero y febrero como los más fríos y la más alta julio y agosto.
Como se observa la caracterización climática de la provincia esta dada por la influencia de diferentes factores que modifican el comportamiento térmico pluviométrico en la zona lo cual a su propio tiempo modifican la humedad relativa, dirección y velocidad del viento y nubosidad. Para el caso de Moa, presenta especiales condiciones climatológicas, en las precipitaciones, las mayores ocurren en octubre y diciembre y en todos los meses son superiores a 108 mm.
Zona costera: abarca los municipios de Gibara a Banes, es la franja con los valores más altos de irradiación con temperaturas medias de 24,4 ºC en febrero (mes más frío) hasta 28,4 ºC en julio y agosto. El viento sopla predominantemente del este, con una velocidad media anual de 4 m/s. Esta zona presenta el máximo de condiciones de calor sofocante que durante el día alcanza magnitudes extremas.
Zona llana interior: en estos municipios la temperatura media varía de 22,8 ºC en febrero a 27.1 ºC en julio, presenta características de continentalidad en su régimen térmico. El régimen de lluvias es superior a la zona costera, en el período lluvioso precipita como promedio el 77% del valor anual, en ocasiones superan los 100 mm. La dirección del viento del NE al ENE con velocidades medias de 10.9 a 16.4 km/h, en la noche y madrugada ocurren grandes períodos de calma.
Zona montañosa: se caracteriza por su alta pluviosidad y temperaturas frescas durante todo el año con medias entre 19.1 ºC y 23.4 ºC. El viento presenta sus particularidades orográficas, durante los meses del período seco su dirección es del NE con 10.8 a 12.6 km/h de velocidad promedio, en el resto de los meses puede soplar del SSE y este con registros muy inferiores. Estudios realizados por los especialistas del Centro Meteorológico Provincial arrojan que la variabilidad climática ha tenido un impacto negativo sobre el clima del territorio, la secuencia de los eventos ENOS (El Niño) y AENOS (La Niña) ha provocado el incremento de fenómenos dañinos a la economía y al medio ambiente tales como fuertes sequías, tormentas locales severas, lluvias intensas, aumento de la aridez, salinidad de los suelos, entre otros.
Atributos y símbolos
El hacha de Holguín
El 28 de mayo de 1981 por Resolución No. 44 fue declarada el Hacha de Holguín como símbolo del territorio. Desde que fue hallada en 1860 por un oficial del Ejercito Español, fue conocida por ese nombre. Construida por grupos agroalfareros del Siglo XV, su valor artístico hace que sea una obra excepcional dentro de la cultura aborigen cubana.
Fabricada con piedra peridotita de color verde olivo, tiene impreso un sello distintivo que la hizo significativa dentro de las de su tipo. Representa una figura antropomorfa, masculina con una diadema en la parte superior y los brazos colocados sobre el pecho. La pieza mide 350 mm de longitud, 76 mm de ancho y 48 mm de mayor grosor.
Una réplica del hacha ha sido entregada a altas personalidades que han visitado a Holguín, centros de trabajo o estudio, a obreros vanguardias y figuras destacadas de la cultura y las ciencias, que han hecho aportes meritorios a la localidad y al país. Entre estos se destacan Fidel y Raúl Castro, Maurice Bishop (presidente de Granada), Silvio Rodríguez, José A. García Castañeda (Historiador de Holguín), Eusebio Leal, Antonio Núñez Jiménez, entre otros.
El himno de Holguín
El 17 de mayo de 1870 el coronel del Ejército Libertador Pedro Martínez Freyre compuso la letra del himno holguinero. La música se le atribuye a don José María Ochoa, notable compositor y músico. Cuando todavía estaba fresco el hecho de la Demajagua y rodeado precisamente de holguineros en una etapa eufórica, ya que se esperaba la llegada a las costas del territorio de expediciones con armamentos y municiones; su autor con gesto patriótico elaboró las estrofas de este himno guerrero que clamaba por la libertad en la isla del yugo español llamando a los holguineros a incorporarse al Ejército Libertador.
Letra del Himno
A la lid, holguineros valientes
No temáis del tirano la saña
Ni dobléis como siervos la frente
Ante el déspota inicuo de España
Somos libres. Lo anuncia el sonido
Que se esparce del viento en las alas
Del cañón el tremendo estampido
Y el continuo silbar de las balas.
Libertad, libertad. A tu nombre
Late el alma de gozo en el pecho
Libertad, libertad. Por ti el hombre
Deja alegre su bien y su techo.
Que es mil veces más dulce una fosa
Que la vida en silencio profundo,
Y en la paz del esclavo oprobiosa
Justa befa y escarnio del mundo.
La partitura que se conserva fue hecha por el músico holguinero Porfirio Sánchez según testimonio del soldado mambí Sigifredo Urbino Guillén, músico de la orquesta de Manuel Avilés.
Escudo de la ciudad
El escudo fue confeccionado, pero no a gusto del Cabildo Holguinero, ya que los hechos de armas no fueron representados. El expediente fue engavetado y olvidado hasta 1818. Al ser nombrado Eusebio Escudero, Gobernador de Cuba, lleva la solicitud al Consejo Supremo de India, la que además de escudo pidió otras gracias como eran: la del tratamiento de ilustres para el ayuntamiento holguinero y el de uso de uniformes para su personal.
No es hasta 1831 en que Fernando VII aprueba una Real Cédula, debían ingresar una determinada cantidad de dinero a las Reales Cajas del distrito para poder hacer efectivo el reconocimiento oficial de cada una de ellas; mientras, no podían usarlas. El escudo holguinero es de una sencillez notable. Fue concebido en un contorno acorazonado, el que en la parte superior y al centro tiene un casco con cinco plumas.
En su interior aparecen dibujadas las figuras de los dos patrones de la ciudad: San Isidoro, que fuera Obispo de Sevilla, a quien García Holguín había encomendado su hato y que posteriormente dio nombre a la de San Isidoro de Holguín y la Virgen del Rosario, patrona de los vecinos que poblaron a Holguín cuando fue fundado. Ambos sostienen la corona española. En la parte inferior, a nivel de los pies de las figuras de los santos patrones fueron dibujadas unas lomas que se piensa representan las del grupo Maniabón.
En 1995 se aprobó el escudo que representaba a toda la provincia.
Cultura
Tradiciones y costumbres
Las tradiciones culturales de Holguín tienen su origen a partir de la transculturación producida entre las etnias aborigen, hispana y africana, estos dos últimos componentes representan los troncos básicos de este proceso; además influyen otros grupos étnicos que arribaron en el Siglo XX del Caribe de habla inglesa y francesa, fundamentalmente jamaicanos y haitianos.
Dentro de las tradiciones festivas más antiguas, conocidas desde el Siglo XVIII, se encuentran las fiestas patronales, los altares de cruz, los de mayo y las Romerías de la Cruz de Mayo, ésta en la ciudad de Holguín; todas ellas con verdaderos antecedentes hispánicos en sus inicios, con posterioridad, la población criolla le imprimió su sello particular.
Los Guateques campesinos son celebrados aún, donde la música tradicional es el son montuno, siendo el punto guajiro el de la décima, la música más antigua del campesinado, en la que los instrumentos de cuerdas llevan la voz cantante.
Se practican además las fiestas de culto sincrético. En Sagua de Tánamo se baila aún la tumba francesa que es de origen franco haitiana.
El Órgano, instrumento musical introducido en el siglo XX, ameniza fiestas populares, existe en Holguín tradición en la construcción y ejecución de este. Hoy se han rescatado muchas de las mejores tradiciones culturales como los bailes de salón Lanceros Mayariceros y Lanceros Holguineros, entre otros.
El Casabe, legado aborigen que todavía está presente en la cultura culinaria holguinera y junto al lechón asado constituyen una típica comida cubana. Son la cestería, los tejidos con fibras vegetales y el a crochet las tradiciones artesanales más difundidas, hoy la talla en madera se destaca como elemento enriquecedor de la misma. La talla en madera aún enriquece las tradiciones holguineras.
A través de ella ha llegado una parte importante del acervo cultural de sus raíces y de otras generaciones cercanas que precedieron, lo cual se evidencia en el habla culta y popular del holguinero, en su refranero, en los agüeros y conjuros, leyendas y tradiciones. Todavía se habla de enterramientos de joyas y monedas, de la misteriosa ciguapa y de otros muchos mitos y leyendas que se enriquecen constantemente por las diferentes generaciones.
En 1790 surge la tradición del “Novenario de los Fieles Difuntos”, que acontece cada año del 2 al 10 de noviembre.
Ese mismo año surge la tradición de la Romería o Peregrinación de la Loma de la Cruz. Fundada por el Padre Franciscano Fray Antonio Alegría de la misión de Holguín. - En 1819 se inauguró la Iglesia San José. Este templo tuvo su origen en una pequeña ermita levantada en 1803 por los Padres Franciscano de Holguín y adquiere su forma actual en 1842, con el gobierno del teniente gobernador Garcerón y del Valls, en que se le construyó una hermosa torre, y se instaló en la misma el primer reloj público en Holguín, que perduró hasta 1868, fecha en que fue cañoneada la torre y el edificio. En 1940 fue declarada Parroquia Independiente.
Loma de la Cruz
El lugar más conocido de la ciudad es la Loma de la Cruz, con sólo subir 458 escalones, es posible admirar la ciudad de Holguín y el paisaje que ofrece la pequeña elevación de 261 metros, vinculada a la historia de la ciudad.
El Cerro Bayado su anterior nombre pasó a ser un dato curioso ya que a partir del 3 de mayo de 1790, comenzó a conocerse como Loma de la Cruz. El proyecto lo realizó Vicente Biosca además de la capilla, la rotonda y la reconstrucción del fuerte colonial. La obra se comenzó el 28 de enero de 1927 y quedó concluida el 3 de mayo de 1950.
Ese día subió hasta su cima, donde colocó una cruz de madera el fray Francisco Antonio de Alegría dando inicio a una tradición religiosa: Las Romerías de la Cruz. Esta vieja tradición española rememoraba, según la Biblia el día en que Santa Elena, madre de Constantino el Grande encontró la Cruz del Calvario.
Romerías
Las Romerías de Mayo constituyen una tradición del pueblo holguinero protagonizada por la Asociación Hermanos Saíz (AHS), cada año en el mes de mayo se conjugan la tradición y la modernidad para convertir de esa forma a la ciudad de Holguín en la Capital del Arte Joven. En estas se presenta una muestra de lo más representativo de la cultura nacional e internacional, además de los mejores proyectos de la AHS de cada provincia de la isla.
El hecho religioso cuando se colocó la cruz de madera en lo alto de la Loma de la Cruz es el que mucho tiempo después se convertiría en estas festividades donde tienen lugar todas las manifestaciones del arte y que comienzan precisamente con una peregrinación hasta donde se encuentra la cruz.
Las Romerías se realizaron hasta bien entradas la década del cincuenta. Es por esta razón que Oscar Albanés Carballo, amante de su ciudad, ideó la construcción de una escalinata. En la actualidad se ha retomado esta tradición y ha vuelto mayo a convertirse en un tributo a esta celebración muy holguinera.
Primeros transportes
Mi bella ciudad, yo no me olvido de tí
La ciudad de Holguín en la actualidad sigue creciendo, en historia, en población (caracterizada por sus bellas mujeres), industria, tecnología, etc.; hechos que la consolidan como una de las más importantes del país.
Con más de cinco grandes parques ubicados entre las principales arterias que cruzan la ciudad de un extremo a otro, se ganó el sobrenombre de "la Ciudad de los Parques"
Deporte
El atletismo holguinero en juegos olímpicos
Los Juegos Olímpicos de la Era Moderna fueron rejuvenecidos en 1896 por el francés Pierre de Coubertin, teniendo por escenario esta primera edición a Atenas, Grecia, mientras que tan solo ochos años más tarde un voluntarioso corredor habanero, Félix El Andarín Carvajal, con sus propios recursos, se convierte en el pionero del atletismo cubano en tomar parte en estas citas cuatrienales, al trasladarse hasta la ciudad estadounidense de San Luis, logrando además un decoroso cuarto lugar en la maratón de estos terceros Juegos Olímpicos. Muy tempranamente ya se tenía un finalista en citas olímpicas, pero luego hubo que esperar hasta la versión de Roma en 1960 para que otro atleta criollo arribara a una final, esta vez fue el santiaguero Enrique Figuerola, cuarto lugar en los 100 metros. El propio Figuerola en los siguientes Juegos, logró la medalla de plata en esta disciplina, siendo esta la primera presea del campo y pista cubano en Juegos Olímpicos.
Juan García Dumois, el pionero en juegos olímpicos
La ciudad de México en 1968 fue la sede de los XIX Juegos Olímpicos, cita donde se conquistaron dos preseas de plata, ambas mediante las cuartetas de relevos 4 x 100 metros, en uno y otro sexo, pero es en esta edición donde toma parte el primer atleta holguinero, correspondiendo este honor a Juan García, en la especialidad de 400 metros con vallas.
Juan García Dumois, nació en Banes el 5 de noviembre de 1945 y llegó a la capital mexicana ya con 23 años, en su hoja de servicios no habían grandes resultados, por lo que no se podía esperar mucho de él y así sucedió al ocupar el séptimo lugar en el heats eliminatorio cuatro, Juan realizó tiempo de 51.87 segundos, quedando eliminado en su primera carrera, pero esta carrera junto a la del matancero Miguel Olivera, fueron las primeras de atletas cubanos en esa especialidad en Juegos Olímpicos.
Posteriormente a estos Juegos Olímpicos, Juan García logró la medalla de plata en el Campeonato Centroamericano y del Caribe, celebrado en La Habana en 1969, al año siguiente se titula en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Panamá, además integra el relevo 4 x 400, también ganador de la medalla de oro.
Dos mujeres presentes en Münich 72
La siguiente cita celebrada en Munich, Alemania en 1972, contó con la asistencia de dos atletas holguineras, Carmen Trustée y Asunción Acosta, ambas en la prueba de 400 metros planos, también formaron parte del relevo 4 x 400 metros.
Carmen Trustée Lee, natural de Banes, ciudad donde nació el 16 de julio de 1948, cuando arribó a la edición alemana, ya había logrado algunos triunfos internacionales, dentro de los que se pueden citar, la presea de plata en los 400 metros planos en la Universiada de Turín en 1970; los títulos Centroamericanos y del Caribe de Panamá 70 en 400 y 800 metros planos y la medalla de plata en los Juegos Panamericanos de Cali 1971 en las disciplinas de 400 metros y relevo 4 x 400; además en ese propio año había realizado una exitosa gira europea.
Todo lo anterior le concedía algunas posibilidades de avanzar hasta las finales de la vuelta al óvalo; Carmen inicia su actuación olímpica, ganando su serie eliminatoria con tiempo de 52.80 segundos, todo parecía indicar que la holguinera andaba con buenos pasos, pero una repentina lesión la aparta de la ruta hacía la final, no pudiendo presentarse a la siguiente fase. La otra representante holguinera fue Asunción Acosta Galano, nacida en la ciudad de Holguín el 10 de mayo de 1954, Asunción tiene en los Juegos de Münich su primera prueba de gran nivel, resultando eliminada en su debut al llegar en sexto lugar en los 400 metros con tiempo de 54.52 segundos.
Sus principales resultados fueron logrados integrando ambos relevos, entre ellos se puede citar, los títulos en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Santo Domingo en 4 x 100 y la medalla de bronce en los Juegos Panamericanos de México 1975 en el relevo 4 x 400. Carmen y Asunción integran junto a la guantanamera Marcela Chibás y la espirituana Aurelia Pentón, el relevo 4 x 400 metros, ubicado quinto en semifinales de la cita alemana con nuevo récord nacional de 3:32.44 minutos.
Montreal 76, un holguinero finalista
A los Juegos de Montreal, Canadá en 1976, asisten otros dos atletas holguineros, Richard Spencer y Carlos Álvarez, el primero en salto de altura y el segundo como integrante del relevo 4 x 400 metros.
Richard Spencer Campbell, nació en el antiguo Central Preston, hoy [[Guatemala (Mayarí) |Guatemala]], el 16 de julio de 1955, cuando emprendió viaje hacia la ciudad canadiense ya era titular de los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Santo Domingo 1974 y presentaba una marca personal de 2 metros y 18 centímetros, pero ya en la competencia olímpica no superó la ronda clasificatoria al saltar solo 2.05 y quedar ubicado en el vigésimo noveno lugar.
Carlos Alvarez Sánchez, es natural de Sagua de Tánamo, donde nació el 12 de diciembre de 1956 e integró el relevo cubano medallista de plata en los Juegos Panamericanos de México 75, mientras que en Montreal como integrante de este propio relevo, logra la séptima posición junto a Eddy Gutiérrez, Dámaso Alfonso y Alberto Juantorena, la cuarteta marcó tiempo de 3:03.81 minutos, antes en semifinales habían registrado crono de 3:05.19 para clasificar tercero en la serie número dos.
Este séptimo lugar del relevo largo, donde Carlos Álvarez fue uno de sus integrantes, constituye el primer finalista del atletismo holguinero en Juegos Olímpicos.
Barcelona 92,la mayor asistencia holguinera
La siguiente asistencia de atletas holguineros a Juegos Olímpicos se produce en la cita de Barcelona, España en 1992 y en esta ocasión un total de cuatro hijos de esta tierra se hacen presentes en la ciudad Condal; son ellos las velocistas Liliana Allen y Eusebia Riquelme, la lanzadora de disco Bárbara Hechavarria y la corredora de 400 metros Nancy McLeon, es de paso la mayor cifra de holguineros asistentes en citas estivales.
Liliana Allen Doll, natural de Cueto, donde nació el 24 de mayo de 1970, fue medallista de bronce en el Campeonato Mundial Juvenil de Sudbury, Canadá en 1988, llega a Barcelona siendo además la titular en 100 y 200 metros de los Juegos Panamericanos celebrados en La Habana en 1991, también se había impuesto en los 100 metros en las Universiadas de Duisburgo, Alemania en 1989, acumulando ya cierto fogueo internacional, lo que le daba posibilidades de convertirse en finalista olímpica, opciones que hizo realidad al lograr el octavo lugar en la final de los 100 metros planos.
Su bregar en el estadio de Montjuic lo inicia siendo tercera con 11.49 en su heats eliminatorio; en cuarto de final repitió esa ubicación, ahora con 11.33 segundos, llegando en semifinales a 11.28, este crono fue rebajado en la final hasta los 11.19 segundos, constituyendo hasta la pasada edición de Atenas, el mejor crono de un octavo lugar olímpico.
Liliana también integró el relevo 4 x 100 metros junto a Idalmis Bonne, Aliuska López y la también holguinera Eusebia Riquelme, este relevo aunque avanzó hasta la final, no pudo finalizar la carrera. En este relevo como se mencionó antes, estaba Eusebia Riquelme Cerrazón, quien nació en el municipio Alto Songo, perteneciente a Santiago de Cuba, pero desde muy pequeña se trasladó para Holguín y siempre representó a esta provincia en eventos nacionales.
Otra de las asistentes a los juegos catalanes fue la lanzadora de disco Bárbara Hechavarria Aponte, natural de la ciudad de Holguín, donde nació el 6 de agosto de 1966, esta morena holguinera era la tercera representante criolla en esta disciplina en Barcelona, pues los roles protagónicos recaían en Maritza Martén, quien ganó el título e Hilda Elisa Ramos, ocupante del sexto lugar Bárbara cuando llega a la cita olímpica, exhibía en sus archivos el título de los Juegos Panamericanos de La Habana 91 y de los Centroamericanos y del Caribe de México 90, pero los 60.22 metros que lanzó en la ronda clasificatoria, no le bastaron para incluirse en la final, quedando eliminada.
Corresponde ahora a Nancy McLeon Ferrera, natural de Banes, municipio donde nació el 1 de mayo de 1971. Sus principales resultados antes y después de la cita olímpica han estado marcados como miembro del relevo 4 x 400, especialidad en la que conquistó el título en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de México 90 y la medalla de plata en la cita Panamericana de La Habana 91, entre otros. Ahora en Barcelona integra junto a Julia Duporty, Odalmis Limonta y Ana Fidelia Quirot del relevo 4 x 400, cuarteta que es descalificada en las semifinales.
Atlanta 96, acoge también presencia holguinera
Efectivamente, los llamados Juegos del Centenario, celebrados en la ciudad de Atlanta, Estados Unidos en 1996, también tienen presencia del atletismo holguinero en citas olímpicas, siendo las representantes Liliana Allen y Bárbara Hechavarria, ambas ya habían estado presentes en los Juegos anteriores.
Liliana Allen había tomado parte en Barcelona en la prueba individual de 100 metros, ahora solo lo hace como integrante del relevo 4 x 100 y junto a Virgen Benavides, Idalia Hechavarria y Aliuska López, esta posta resulta eliminada en la primera fase, al ser quinta con tiempo de 44.32 segundos.
Por su parte Bárbara Hechavarria aunque envió el disco un poco más lejos que cuatro años antes, tampoco logra avanzar a finales y con 61.98 queda eliminada. Así termina la asistencia de los atletas holguineros a Juegos Olímpicos, pues en las ediciones de Sydney 2000 y Atenas 2004, no hubo representantes de la también nombrada Ciudad de los Parques.
Beijing 2008, primera medalla del atletismo holguinero
Después de más de 100 años de participación del campo y pista cubano en Juegos Olímpicos, llega la primera medalla para el atletismo holguinero en citas cuatrienales, esta en Beijing 2008 mediante el decathlonista Leonel Suárez. A Juegos de la capital China asistieron dos representantes holguineros, pues Suárez fue acompañado por Carlos Veliz Wilburt en la impulsión de la bala.
Leonel Suárez, nació el 1 de septiembre de 1987 en Santiago de Cuba, luego de transitar por las instituciones provinciales de alto rendimiento de Holguín, Escuela de Iniciación Deportiva Escolar (EIDE) y Escuela Superior de Perfeccionamiento Atlético (ESPA), llega en 2004 a la preselección nacional juvenil de atletismo, en la que continúo perfeccionando su preparación, así en 2007 es promovido para el Equipo Nacional de Atletismo.
Los 8527 puntos de Suárez le representaron lograr el tercer lugar de la competencia olímpica, allí fue antecedido por el estadounidense Bryan Clay, ganador con 8791 puntos y el bielorruso Andrei Krauchanka, segundo con 8551 puntos, esta no solo fue la primera medalla del atletismo holguinero, sino que además constituye la primera del campo y pista cubano en esa especialidad atlética.
El otro representante holguinero en estos juegos, Carlos Veliz, se desempeñó en la impulsión de la bala, pero resultó eliminado en la fase clasificatoria al lanzar apenas 19.58 metros, la marca de clasificación fue de 20.40 metros, la cual cumplieron solo cuatro atletas de los 45 que se presentaron, completándose la final los restantes ocho mejores registros. Veliz en esa temporada había lanzado la bala hasta los 20.65 metros y de haber repetido esa marca, se ubicaba dentro de los ocho mejores.
Atletismo holguinero en Juegos Panamericanos
La idea sobre la celebración de unos juegos con la participación de todos los países del continente se comenzó a gestar a finales de la década de 1930, pero no es hasta que se convoca un Congreso Deportivo en Buenos Aires, Argentina en 1940 cuando se consolida la idea, pero como sucedió con otros juegos la Segunda Guerra Mundial deja para más tarde su materialización convocados finalmente en Londres en 1948 para el verano de 1951 en la capital argentina.
México 1955
La primera aparición holguinera en Juegos Panamericanos ocurre en la Ciudad de México en 1955, cuando el saltador Claudio Cabrejas, natural de Banes el 30 de julio de 1932 participando en las modalidades de salto de longitud y triple, ubicándose en quinto y sexto lugar respectivamente con registros de 7.30 y 15.00 metros.
La ciudad de Sao Paulo, Brasil en 1963 celebra los IV Juegos Panamericanos, en la cita el holguinero Enrique Samuells – natural del antiguo Central Tarafa en la modalidad de lanzamiento del martillo, se ubica en cuarto lugar con un envío de 56.21 metros. Samuells cuatro años más tarde logra la medalla de plata en la cita de Winnipeg, Canadá, alcanzando 64.66 metros, solo aventajado por el estadounidense Thomas Gage quien lanzó 65.32 metros. La vallista Daysi Hechavarría se suma, alcanzando el sexto puesto con 11.5 segundos en los 80 metros con vallas.
Primeras medallas en Cali Colombia 1971
En Cali, Colombia en 1971, ve coronar a la primera mujer doble medallista de la tierra holguinera en Juegos Panamericanos Carmen Trustée, segunda en los 400 metros planos y en el relevo 4 x 400 metros, en la primera especialidad marcó 52.8 segundos, mientras que en la segunda lograba 3:34.0 como miembro de la cuarteta integrada por Beatriz Castillo, Marcela Chibás y Aurelia Pentón.
El atleta saltador de longitud José Ramón Díaz, es ubicado en cuarto con un salto de 7.62 metros.
Ciudad de México 1975
En la cita deportiva continental celebrada en Ciudad de México en 1975, nuevamente los atletas regresan con medallas, ahora una plata y un bronce, con la particularidad de ambas fueron ganadas en las pruebas de relevo, el subtítulo fue para Carlos Álvarez como integrante junto a Eddy Gutiérrez, Dámaso Alfonso y Alberto Juantorena del relevo 4 x 400 masculino, el tiempo de la cuarteta fue de 3:02.82 minutos, mientras que el bronce llegó mediante Ela Cabrejas y Asunción Acosta, integrantes junto a Regla López y Aurelia Pentón del relevo 4 x 400 para mujeres. El saltador de altura Richard Spencer* se ubicó en el cuarto lugar con un salto de 2.15 metros.
En San Juan, Puerto Rico, 1979, Antonio González [[Lanzamiento de la jabalina
|jabalinista]]logra la medalla de plata con registro de 84.12 metros, superado por apenas cuatro centímetros por el estadounidense Duncan Atwood, mientras Raúl Pupo se hacía con la presea de bronce, metal que también lograba Carlos Alvarez – su segunda presea en citas continentales – como integrante del relevo 4 x 400 (Frank Montieth, Pedro Tanis, y Alberto Juantorena)
Caracas, Venezuela 1983
En Caracas, Venezuela en 1983, Reynaldo Patterson logra el cuarto lugar en la jabalina
Indianápolis, Estados Unidos 1987
Indianápolis, Estados Unidos en 1987, Liliana Allen y Eusebia Riquelme, quienes acompañadas por Aliuska López y Susana Armenteros, solo cedieron ante la cuarteta estadounidense, ambas velocistas tomaron parte en los 100 metros, ubicándose cuarta y quinta respectivamente.
La Habana 1991
La Habana 1991 se logran en Holguín tres títulos panamericanos, Liliana Allen fue la reina de la velocidad al ganar los 100 y 200 metros, mientras que Bárbara Hechavarría se coronaba en el lanzamiento del disco, Liliana sumó otra presea, de plata en el relevo 4 x 100 junto a su paisana Eusebia Riquelme y las guantánameras Idalmis Bonne y Julia Ester Duporty, la corredora Nancy McLeon en el relevo 4 x 400, cuarteta que integró junto a Duporty, Ana Fidelia Quirot y Odalmis Limonta.
Mar del Plata, Argentina 1995
Mar del Plata, Argentina, Liliana Allen reinó solo en los 200 metros, fue segunda en los 100 y en el relevo 4 x 100, pero Nancy McLeon junto a Surella Morales, Idalmis Bonne y Julia Ester Duporty, lograron la medalla de oro, en tanto Bárbara Hechavarría lograba la presea de plata en el lanzamiento del disco.
Río de Janeiro, Brasil 2007
En el 2007 en Río de Janeiro, Brasil contó con la asistencia de tres atletas holguineros, Carlos Veliz en la impulsión de la bala, Leonel Suárez en el decathlon y Norbert Gutiérrez en la maratón, Veliz regresó con la presea de bronce en su primera competencia internacional de nivel, lanzó 19.75 metros y fue aventajado por el canadiense Dylan Armstrong (20.10) y el jamaicano Dorian scout (20.06), mientras que Leonel Suárez también en su debut internacional, lograba el cuarto lugar con 7936 puntos, en tanto Norbert no finalizaba en la agotadora prueba de los 42 kilómetros y 195 metros.
El atletismo holguinero ha logrado un total de 19 medallas de ellas cinco de oro, 11 preseas de plata y tres de bronce.
Recordista nacionales en el atletismo holguinero
Récord es hacer referencia a una cota máxima en una determinada actividad o un resultado que supera lo que se había logrado hasta ese momento, entonces conociendo ya la definición de este término, se pueden referir a los recordistas cubanos dentro del atletismo holguinero.
La Federación Cubana de Atletismo (FCA) se fundó en el año 1922, siendo desde ese momento la encargada de acreditar todo lo concerniente al quehacer atlético nacional e internacional de los atletas cubanos. Aunque, desde 1905 se conforman los listados nacionales, los récords se compilan de manera oficial desde 1922, en el sector masculino y desde 1933 para las mujeres.
Holguineros recordistas
El primer atleta holguinero que implantó un récord nacional en el atletismo cubano fue el saltador Claudio Cabrejas Lopetegui con 14.73 metros en salto triple, hecho ocurrido el 17 de enero de 1954 en La Habana, más tarde el 8 de marzo en Ciudad de México durante las competencias correspondientes a los Juegos Centroamericanos y del Caribe, Cabrejas, natural de Banes (1932) logra el oro en el salto de longitud con un brinco de 7.46 metros, su segundo récord nacional.
Mujeres pioneras en los récords
Daisy Hechavarría Parra, (Holguín 1942) quien integrando junto a Irene Martínez, Nereida Borges y Miguelina Cobián el relevo 4 x 100, lograron un tiempo de 46.2 segundos, el acontecimiento tuvo lugar el 11 de noviembre de 1963 en [[La Habana], Daisy al año siguiente, el 21 de junio en Santiago de Cuba, corre los 800 metros en 2:26.8 minutos para convertirse en la primera atleta holguinera en lograrlo en una disciplina individual.
Record nacionales
En total el atletismo holguinero acumula 89 récords nacionales, de ellos 36 fueron realizados en el extranjero, siendo Ciudad de México con seis la sede más prolifera, mientras que los Juegos Panamericanos con siete, es la competencia más propicia. Varios son los atletas multirecordistas, pero entre los hombres nadie supera al lanzador de martillo Enrique Samuells Ricardo (antiguo Central Tarafa 1938), quien tiene 17 primados cubanos en esa compleja especialidad, cosecha que inició al lanzar 51.29 metros el 27 de mayo de 1962 en La Habana y finalizó con 68.78 el 9 de junio de 1968 en Sofía, Bulgaria, en el apartado femenino este honor corresponde a la saltadora con pértiga Mariana McCarthy, que ostenta 19 cotas, reinado que inició con 2.60 metros el 5 de abril de 1996 en La Habana y culminó con 3.75 el 14 de mayo de 1999 también en la capital cubana.
Otros que poseen varios topes nacionales son la corredora Carmen Mónica Trustée Lee (Banes 1948) con 13, repartidos así, seis en 800 metros, cuatro en el relevo 4 x 400, dos en 400 metros y uno en 1500 metros; la velocista Liliana Allen Doll (Banes 1970) implantó ocho marcas nacionales, cuatro en 100 metros, dos en los 200 y dos integrando el relevo 4 x 100, la saltadora de altura Hilda Fabré acumula siete, todos en su especialidad, mientras que con cuatro aparece el también saltador de altura Richard Spencer Campbell (antiguo Central Preston 1955).
En la actualidad, solo están vigentes tres récords nacionales impuestos por atletas holguineros, dos de Liliana Allen, 11.10 segundos en 100 metros planos y 22.7 segundos en los 200 metros, así como los 8 mil 654 puntos de Leonel Suárez en la prueba de decathlon.
Categoría juvenil
En la categoría juvenil, también conocida como junior y enmarcada hasta los 19 años, los atletas de la provincia de Holguín han logrado sobresalir, en ella acumulan 48 récords nacionales, siendo ampliamente dominado este sector por las damas con 43 marcas.
En este apartado, el primer recordista fue José Ramón Díaz Rodríguez, (Banes 1952), quien el 26 de junio de 1971, saltó en Sofía, Bulgaria, 7 metros y 79 centímetros, mientras que entre las mujeres, el honor corresponde a Asunción Acosta Galano, (Holguín 1954) cuando el 9 de agosto de 1972, logró en Varsovia, Polonia un crono de 53.6 segundos en la prueba de 400 metros planos.
La atleta con más cotas nacionales implantadas en esta categoría es la saltadora con pértiga Mariana McCarthy, con 19 topes cubanos, en tanto la velocista Liliana Allen, logró 15, de ellos ocho integrando el relevo 4 x 100 metros, especialidad en la que Eusebia Riquelme Terrazón, - atleta nacida en Alto Songo, Santiago de Cuba, pero su formación deportiva la realizó en Holguín - logró cinco, también está la banense Nancy McLeon Ferrera (Banes 1971) con cuatro, todos como integrante del relevo 4 x 400 metros, mientras que entre los varones, Carlos Veliz acumula dos en la impulsión de la bala.
En la actualidad están vigentes seis récords nacionales juveniles implantados por atletas holguineros, Liliana Allen ostenta cuatro, 11.14 segundos, (cronometraje electrónico) y 10.9 (cronometraje manual) en los 100 metros, 22.7 segundos en los 200 metros y 44.04 en el relevo 4 x 100, especialidad en la estuvo acompañada por su paisana Eusebia Riquelme y por las capitalinas Ana María Valdivia y Aliuska López, las otras cotas actuales están en poder de Nancy McLeon, con 3:31.81 minutos en el relevo 4 x 400 metros y Carlos Veliz con 18.05 metros en la impulsión de la bala (7.26 kg).